José Enrique ‘Quiqui’ Morente, hijo de Enrique Morente, sigue los pasos de su padre no sólo al hacer del cante su instrumento sino por actualizar el género sin renunciar al flamenco puro.
Hermano de Estrella y Soleá Morente e hijo de la bailaora Aurora Carbonell “La Pelota”, es imposible no hacer referencia a su familia al hablar de sus credenciales como cantaor.
Sin embargo, el más joven de los Morente imprime su propia personalidad en sus interpretaciones y se ha forjado una carrera que avanza poco a poco, pasando por un buen número de escenarios acompañando a su padre y a su hermana o colaborando con artistas tan diferentes como Tomatito “Hijo” (con quien se presentó en el Festival VII Suma Flamenca de Madrid), con Habichuela “nieto” en el Festival Flamenco Ciutat Vella, con los jordanos Khoury Project o el grupo de rock Sonic Youth.
Lo primero que llama la atención de Quiqui es su aspecto. Lleva el pelo largo y rizado, tiene una mirada profunda y hechuras de galán (algunos dicen que es un cruce entre Brad Pitt y Camarón de la Isla). Pero cuando canta se acaban las tonterías.
A sus 22 años es capaz de poner la piel de gallina con su emocionante e impresionante voz. Tiene, con toda seguridad, un futuro prometedor.