Tres mujeres que hablan, gritan, se conocen, ríen, se confiesan, se enamoran, se traicionan, trabajan, son madres, van a la moda, piensan, se hacen daño, sueñan, sufren, gozan, se insultan, callan, comprenden y viven.
Una sucesión de números interpretados por tres actrices que despliegan, con mínimos recursos, una exhibición de modos escénicos desde posiciones combativamente feministas.
Con la representación de esta obra, Cuántica Producciones quiere rendir homenaje a su autora, Edurne Rodríguez Muro, quien dirigió su estreno en Lugaritz en diciembre de 1995 y que a través de Mujeres al rojo vivo, con su particular manera de escribir, poética y desgarradora, mantiene vivo el espíritu libre y rebelde la mujer.
