Te lo advierto ya: pese a llamarse “Al fin solo”, éste NO es un espectáculo en el que se celebre “estar en soledad”. Todo lo contrario. Se trata de evitarla, de huir de ella como alma que lleva el diablo. Porque, digan lo que digan, en según qué cuestiones humanas que nos ocupan gran parte de la vida (juegos de mesa, sexo, arrancar un coche en segunda…) la compañía de otro u otros se agradece como agua de mayo en agosto. Y no te digo ya si lo que se pretende es establecer una pareja: en ese caso es matemáticamente irrefutable que, como mínimo, hacen falta dos para lograrlo.
De manera que toma buena nota de lo que aquí? se diga, porque vas a asistir a la presentación de un manual que te ayudara? a entender al otro, con vistas a seducirlo, conquistarlo o, simplemente, a mantenerlo enamorado, cosa harto difícil en estos tiempos de pasiones tan volubles y fugaces. ¡Ah! Y te advierto también que todo este show ha sido creado utilizando mi lado femenino. De manera que rezuma sensibilidad, perspicacia e inteligencia por los cuatro costados. Y además conjunta con cualquier cosa y lo puedes ver tanto de noche como de día.