Hacía más de 5 años que no teníamos noticias sobre Leo Bassi. El cómico militante e histriónico visita Arrasate con El último bufón y Tolosa con Utopía; precisamente en un momento en el que la sátira política es tildada de terrorismo. Y precisamente él, el bufón italiano, ya sufrió un aviso de bomba en el camerino de un teatro. Nos encandiló con el BassiBus. Un bus turístico por el mapa de la corrupción de la Gürtel. Si no lo conoces, écha un ojo en youtube. Excesivo.
Este espectáculo se ha convertido en un gran relato en clave surrealista que analiza la utopia no solo en un plano histórico y filosófico, sino también poético al descubrir que “Utopia”, el lugar que no existe, simboliza un espacio temporal diferente donde el tiempo transcurre en términos mas afines a la poesía que a la física.
De su familia, ¡y quizá en sus genes! Leo Bassi ha heredado todos los trucos de la profesión y es extremadamente hábil en las artes circenses como el malabarismo con los pies (ha sido citado en la Enciclopedia Oxford de las Artes Escénicas). Sin embargo, más que continuar una tradición teatral, su propósito es mantener vivo, en la realidad de hoy, el espíritu tarambana y provocador que ha sido el sello de los Bassi desde que la familia está en el negocio.
Para Leo, el entretenimiento no sólo es placer y diversión, ¡es una excusa!. El significado real de cualquier espectáculo debería ser, antes que nada, dar a la gente una experiencia apasionante, sensacional y estremecedora.
