Claro que sí, bravo. Desde esta humilde, literalmente hablando, revista, aplaudimos los pocos logros que hayas tenido. Hasta los que no lo son pero tu has maquillado hasta parecer matrículas de honor. Joder, es que eso es arte.
Te gritamos Hurra&Bravo por el simple hecho de seguir vivo. Y es que 2016 ha sido el año obituario. El mundo de la cultura ha perdido a figurones como Leonard Cohen, Sharon Jones, Dario Fo, David Bowie, Lemmy “el de Motorhead”, Gene Wilder (el de “No me chilles que no te veo”), Bud Spencer. el gran Prince, la enorme Chus Lampreabe o hasta La Veneno. Un montón de gente que, cada cual con sus artes, nos había hecho pensar que el mundo es un lugar que merece la pena vivir.
Y es que si algo nos hace falta es gente que haga del planeta un lugar mejor. Confíen si les decimos que en estas páginas hay unas cuantas personas de esas. De las que se lían para organizar unas jornadas, montar conciertos, su-
birse a un escenario a recitar o enmarronarse con un ciclo de docus. Gente a la que hay que celebrar mientras demuestren seguir vivos y por las que hay que dejarse contagiar y apoyar yendo a sus bolos, charlas o proyecciones. Así que por aquello de no pasar a engrosar la lista de los muertos vivientes (a finales de diciembre podrán ver muchos en su centro comercial más cercano), acérquense al teatro, a un concierto, al cine o participe en un taller que le interese. Vivan y hagan vivir, que es lo que mola.
