Lo miramos y no paramos de fliparla: hemos llegado a 2020. Cambio de década, número redondo con olor a futuro y, aquí seguimos, dándole a la tecla para haceros llegar el salseo cultural a vuestro váter. Lo flipamos porque, una idea que tuvimos allá por 2010, sigue manteniéndose en pie con sangre, sudor y cerveza. Por aquel entonces 2020 nos hubiese parecido el futuro.
Sí, ese tiempo en el que todo el mundo vive adosados clónicos con jardín y garage, los coches planean sobre el asfalto y en casa hay un robot gracioso y torpe que, con su voz metálica, nos pregunta qué queremos para el desayuno. También teníamos la opción B, el post-apocalipsis con sociedades de hipercontrol a través de la tecnología o enamorarnos de una voz dentro de un teléfono móvil. Maldita sea, ¿esto era el futuro?
Menos mal que sigue habiendo esperanza por el presente. Un nuevo mes con más de 300 convocatorias, con un Dock of the Bay delicioso, con estrenos de Khea Ziater y Marie de Jongh, con bolos y vida en Kremlin, Ambigú, Badulake, Daba, Helldorado y un millón de espacios que hacen del mundo un lugar mejor. Abrazemos el presente. Ongi etorri, 2020.