Musika Industriaren Elkartea, con el apoyo de las asociaciones Kultura Live, Musikagileak y Musikari, que representan al sector musical de Euskal Herria; han remitido un comunicado sobre la programación musical de cara al verano, tanto a los principales ayuntamientos como a Eudel, asociación de municipios vascos. Desde NOIZ nos sumamos a esta causa para reclamar, una vez más, que la cultura no sólo es segura sino también necesaria para la salud y el desarrollo de nuestras sociedades.
Este escrito solicita a las instituciones locales que apuesten por mantener sus programas festivos, contemplando diferentes planes para realizar conciertos en las condiciones sanitarias oportunas. Se les insta a buscar alternativas a la suspensión de actos culturales y a definir un calendario de conciertos y otras artes en vivo de cara a los próximos meses. (Debajo el comunicado completo).
Y como la movilización sí que sirve para algo (y además es un derecho), durante estas semanas hemos tenido noticia de nuevas iniciativas para impulsar la reactivación del sector musical: como la propuesta de habilitar el Iradier Arena para la celebración de conciertos y otras actividades culturales.
Un nuevo ejemplo de que la colaboración entre diferentes entidades para la generación de actividad musical es posible y, a pesar de la falta de respuesta por parte de los ayuntamientos a quienes se han dirigido estas asociaciones, seguiremos buscando y reivindicando conjuntamente la manera de mantener la cartelera de conciertos para los próximos meses.
ESTE VERANO ¡PROGRAMA MÚSICA!
Quedan pocos meses para la época estival, tiempo de fiestas populares que suponen el mayor escaparate de la música en vivo.
Desde las asociaciones Musika Industriaren Elkartea (MIE), Musikagileak, Musikari y Kultura Live, que representan al sector musical de Euskal Herria, trabajamos cada día por seguir celebrando conciertos y por mantener vivo el sector. Desde marzo de 2020 hemos aprendido a convivir con la pandemia y a garantizar la seguridad en los actos culturales mediante la aplicación de protocolos estudiados y testados.
La reducción de aforos, las estrictas medidas de seguridad en salas y teatros y la responsabilidad que ha demostrado tener el sector en su conjunto ha dado como resultado que no se hayan producido contagios significativos en conciertos.
A nivel estatal tenemos proyectos piloto, como el ensayo en la Sala Apolo de Barcelona o los conciertos celebrados en el Wizink Center de Madrid, que también han demostrado que las medidas de prevención y control adoptadas son eficaces.
Todo ello nos empuja a músicos/as, técnicos/as, espacios culturales, oficinas de comunicación y promotores/as a luchar por mantener activo el sector musical. Hemos explorado diversas alternativas en previsión de las posibles medidas que impongan las autoridades competentes.
Pedimos que las instituciones locales apuesten por mantener sus programas festivos contemplando diferentes planes para realizar conciertos en las condiciones sanitarias oportunas, según el comportamiento del virus en cada momento. Es necesario buscar alternativas a la suspensión de actos culturales y definir un calendario de conciertos y otras artes en vivo de cara a los próximos meses. Sería muy positivo para reactivar el sector, uno de los sectores más afectados por la pandemia, y volverá a poner banda sonora a las vidas de los habitantes de su localidad.
