Unos niños juegan en el país donde todo empieza. Se afanan en descubrir el mundo. Imitan a los mayores. Se atreven a amar sin saber cuál es su verdadero significado. No dudan en enemistarse antes, incluso, de encontrar la palabra odio en sus bolsillos. Saben de olores, piel, caricia, abandono, refugio, deseo. No saben del tiempo. Y de pronto, han transcurrido más de sesenta años.
Ahora, envejecidos, saben del tiempo. Lo que no saben es que el amor siempre nos da una oportunidad.
El teatro como lugar de encuentro para compartir emociones y reflexiones, dudas y certezas.
Teatro de adultos para niños y teatro infantil para adultos.
