Dos viajeros curiosos van dando vueltas mientras descubren mundos suspendidos y mundos luminosos, mundos que giran y traen la noche y el día, pequeños mundos que se convierten en grandes, mundos hechos de apariencia y de juegos.
Un espectáculo con movimientos circulares, en cambio constante, con música e imágenes mágicas y juguetonas.
La Baracca-Testoni Raggazzi lleva 40 años trabajando en teatro para niños y jóvenes. Sus producciones se centran en el teatro de actor y se caracterizan por una poética orientada a generar sorpresa a través de una simplicidad que parte de lo más esencial.